Desde que comencé este proyecto de entrevistar mujeres en cuarentena, una que tuve en la mira fue a Ana María, porque conozco, sigo y amo su emprendimiento KUPA, y porque tuve la suerte de conocerla personalmente meses antes de que comenzara esta revolución, y me encantó su forma de ser, su trabajo y su enorme sonrisa.
Así que recién lancé las cuarenta preguntas, se las mandé a ella… solo que me hizo esperar un poco, lo cual agradezco un montón y entiendo, porque para ella, como para muchos otros emprendedores, esta cuarentena ha sido reinventarse para no naufragar. Sabía que si no contestaba -y además porque lo veía en las redes sociales de Kupa- era porque ni su cabeza ni su cuerpo estaban descansando, que seguro iba mil revoluciones trabajando para mantener ese barquito a flote, y bien que lo hizo, y bien que pudo contestar las preguntas.
Gracias Anita y solo aplausos para ti y para la gente maravillosa de Kupa.
PD.: Ya tengo mi tapabocas, ¡yujuuu!.